¿Qué es el metaverso? Su impacto en la oficina del futuro

Viajes de negocio, reuniones de trabajo, acudir a la oficina. La realidad ha cambiado. Más aún con la llegada de la pandemia. Durante meses, hemos estado en casa, realizando estas tareas detrás de la pantalla. Ahora, con la vuelta a la oficina, las empresas apuestan por un modelo híbrido, entre el teletrabajo y la asistencia presencial. Y es que, si algo hemos aprendido, es que la flexibilidad laboral es un bien muy cotizado.


¿Cómo se ha gestionado la ‘vuelta a la normalidad’ en el mundo laboral? Unos han apostado por la incorporación escalonada en función del rango, y otros por la combinación entre la asistencia y el teletrabajo por días. Sin embargo, algunas empresas han aprovechado el potencial de las nuevas tecnologías, como la realidad aumentada o el IoT (Internet of Things), para gestionar esta vuelta.


El anuncio del lanzamiento del Metaverso por parte de Facebook (ahora Meta) ha cambiado las tornas. A través del uso de realidad virtual y aumentada, los usuarios podrán tener una experiencia inmersiva en el mundo digital. ¿Cómo afectará esta tecnología a la gestión y el uso de las oficinas del futuro?


¿Qué es el metaverso?


Hoy en día, ya existen aplicaciones que, sin ser el metaverso inmersivo y multisensorial que busca Meta, se asemejan. Podemos asistir a un congreso virtual o a exposiciones de proyectos en una empresa, y mantener conversaciones. De cara a las empresas, muchas ya apuestan por la realidad aumentada para gestionar sus workplaces. Pero, Meta, con su metaverso, pretende ir más allá. Se trata de un gemelo digital, que simula lo que ocurre en el mundo físico en tiempo real.


En el mundo laboral, por ejemplo, las empresas que apuestan por el metaverso pretenden crear una representación virtual de tu oficina, a la que puedas acudir a trabajar y tener reuniones con otras personas a través de avatares. Pero, va más allá de la comunicación. Busca la interacción y la inmersión en un mundo que no se pone en pausa, como los videojuegos. Cuando salgas y vuelvas a entrar, las cosas habrán cambiado.


Con el metaverso, se persigue una sensación de presencia mayor que la que se tiene hoy día en Internet. El usuario tiene que poder moverse e interactuar en un mundo virtual con la percepción psicológica de que, realmente, está en ese mundo. A través de la realidad virtual y aumentada, el usuario se sumerge y responde física y mentalmente de manera similar a como lo haría en el mundo real.


La realidad aumentada y el metaverso


¿Cuál es la puerta de entrada al metaverso? El nuevo escenario digital apuesta por la realidad aumentada como punto de partida. Y es que esta tecnología permite añadir información virtual sobre el mundo real. Su ventaja: no necesitas más que un teléfono móvil.


En las oficinas, por ejemplo, ya se utiliza esta tecnología para gestionar los espacios. Todo lo que es susceptible de ser etiquetado puede administrarse a través de realidad aumentada. ¿Quieres encontrar una plaza libre de aparcamiento?, ¿reservar una sala? o ¿un espacio en el comedor de tu oficina? Solo necesitas tu teléfono para leer una pegatina. Así obtendrás información en tiempo real.


Más allá de la realidad aumentada, el metaverso se basa en la interoperabilidad, en la capacidad de compartir datos y facilitar el intercambio de información y conocimiento a través de la tecnología blockchain y los NFT. Se trata de un nexo entre el mundo real y el digital que, apoyado en la idea de la web 3.0 y la posibilidad de poseer activos digitales, elimina las barreras entre ambos mundos.


El metaverso y las oficinas


La pandemia cambió el trabajo tradicional de oficina a un modelo híbrido, entre lo presencial y lo remoto. Con la llegada del metaverso, ¿qué innovaciones podemos esperar en el entorno laboral? Aunque no se tenga la certeza, parece que la creación de experiencias virtuales podría acabar con la división entre la oficina y el trabajo remoto, especialmente a través de tecnologías de realidad virtual y aumentada.


No se trata de romper con lo físico, sino de crear espacios de trabajo que aúnen ambos tipos de interacciones. Crear una experiencia inmersiva para los trabajadores remotos y de oficina podría mejorar la satisfacción de los empleados, aumentar su productividad y nivelar el campo de juego, independientemente desde dónde trabajen.


Aunque queda mucho potencial del metaverso por desbloquear, las empresas ya pueden utilizar alguna de sus propuestas:


Presente: la realidad aumentada en las oficinas


Las empresas pueden analizar los datos de entornos conectados a través del IoT (Internet of Things) para evaluar los resultados y aprovechar la IA para mejorar y automatizar las tareas. También, pueden hacer uso de la realidad aumentada para áreas como el mantenimiento predictivo. El metaverso permite identificar cuándo es probable que falle un componente, incluso optimizar el uso de la energía y reducir el tiempo de inactividad.


Las empresas también aplican la realidad aumentada para:


  • Formar a los empleados con simulaciones
  • Mejorar los procesos de reparación
  • Visualizar contenido en vídeo o videollamadas mientras se trabaja


Futuro: presencia real, virtual y aumentada


Si la interacción en el metaverso se reduce al mero intercambio de palabras, sin expresiones faciales o corporales, es difícil que fluya la conexión. También lo es si no contamos con apoyos visuales o textuales compartidos. Entonces, ¿cuáles serán los próximos pasos del metaverso en el ámbito laboral?


  • Avatares que reproduzcan las expresiones faciales y corporales, a través del uso de dispositivos que lean nuestros labios y la zona ocular. Incluso, yendo un paso más allá, herramientas que permitan el full-body tracking. Empresas, como Microsoft, ya están trabajando en ello para incorporar los avatares, incluso hologramas, en sus plataformas de videollamada.
  • Para que funcione la colaboración híbrida (física y virtual), las pizarras no pueden ser únicamente virtuales, deben ser compartidas. Es decir, conectadas a las pizarras digitales de las oficinas físicas.
  • Con respecto a las presentaciones, por el momento, en el metaverso se puede compartir pantalla, pero ¿cómo podemos replicar la experiencia física en el mundo virtual de manera más satisfactoria?


El trabajo en 2022


El metaverso todavía se encuentra en las primeras etapas, pero ya ha tenido su reflejo en el mundo laboral. Queda mucho potencial por explotar, pero las empresas ya pueden comenzar sus experimentos. Aquellas que ya apostaban por la realidad aumentada antes del boom del metaverso pueden preguntarse cómo llevar sus servicios al entorno virtual. Al fin y al cabo, por muy disruptiva que sea esta tecnología, el metaverso es un gemelo digital.

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